Cuidado al comprar gel antibacterial
Debido a la emergencia sanitaria que se vive, se usa de forma habitual el gel antibacterial como una forma de prevención, sin embargo, es necesario evitar comprar geles de marcas dudosas, pues su contenido ha sido alterado y se sustituye el alcohol por metanol, lo cual puede causar problemas a la salud.
Si bien, a más de un año de haber iniciado la contingencia sanitaria, sabemos que el lavado de manos con agua y jabón ha sido básico durante esta pandemia ya que se emulsifica por completo la capa envolvente del virus, la cual es una cubierta de fosfolípidos semejantes a una grasa, no siempre se cuenta con el vital líquido, por ello, el uso de gel antibacterial se han vuelto un aliado en contra del coronavirus.
Gel antibacterial: un aliado contra el coronavirus
Estos productos funcionan debido a que su ingrediente principal, el etanol, debe tener como mínimo 70% de concentración para disolver las grasas, no obstante, también reseca la piel; para que esto no suceda, se utiliza glicerina. Al evaporarse el etanol, la glicerina humecta las manos.
De ahí que se debe tener cuidado acerca de lo que se compra, pues en el mercado informal adulteran el alcohol para tener ganancias más altas, puede haber guachicoleo, mercado negro. No sirven los geles que tienen metanol, ya que no emulsifican.
En México existe un mercado informal que realiza esta práctica, de ahí que Estados Unidos emitió una alerta de importación para este material originado en nuestro país. Un estudio, publicado en marzo del año pasado, analizó una serie de geles de origen nacional, el cual demostró que algunos estaban diluidos con agua y otros usaban metanol.
Peligroso para la salud
En este sentido, el metanol es tóxico para el cuerpo humano por la forma como se metaboliza, ya que, para eliminarlo, el hígado lo convierte por una oxidación, primero en formaldehído y, posteriormente, es oxidado a ácido fórmico, lo cual, provoca una fuerte inflamación y destruye la mielina, sustancia protectora de las terminales nerviosas del cuerpo, produciendo “cortos” en el sistema nervioso.
Al consumirse, produce, en primera instancia, visión nublosa porque los nervios ópticos son los primeros en ser afectados, náuseas y vómito por la irritación del tracto gastrointestinal. Si una persona se envenena por esta sustancia, se debe actuar rápido y suministrar antídotos para evitar una consecuencia fatal.
Como medidas para prevenir riesgos, debemos evitar comprar geles de marcas dudosas, no visitar lugares concurridos, tener cuidado con los objetos que se usan en las actividades cotidianas, desinfectar las manos antes y después de tocarlos, preferentemente, lavarse las manos con agua y jabón.
